Con frecuencia hay noticias de protestas entre países miembros de la UE que indican que el país socio A obstaculiza algún determinado producto del país socio B.
Éste caso que publica el Financial Times es uno más, pero que me resulta llamativo: Se trata de que Francia prohibe la matriculación de varios modelos de Mercedes producidos en Alemania. Francia alega que incorporan un líquido en el sistema de aire acondicionado que incumple la normativa medioambiental de la UE.
¿Y qué dicen los alemanes? Lo podemos imaginar. Parece que en septiembre la UE va a reunir a representantes de los dos países para tratar el tema.
Mientras tanto, las francesas PSA Peugeot Citroën y, un poquito, Renault, ven caer sus ventas, mientras que las alemanas Mercedes, BMW y Volkswagen están teniendo buenos resultados. ¿Habrá alguna relación?...
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