Ayer salió en el blog el tema del brandy de Jerez. Eso me recordó mis tiempos de estudiante y la asignatura de Publicidad que cursé hace ya muchos años (finales de los años 80). Nos ponían en clase dos ejemplos de vallas publicitarias que eran de lo mejorcito que se había diseñado en el mundo. En aquella época sólo había TV, sin internet, ni medios avanzados de telecomunicación y la publicidad de vallas era una de las vías importantes para ayudar a la comercialización de los productos.
Las dos vallas en cuestión eran:
(1) El toro que la bodega jerezana Osborne utilizaba para publicitar su brandy Veterano, y que data de 1956. La bodega hasta dedica en su web un amplia información sobre este toro. (y 2) La botella de fino de Jerez de marca Tío Pepe, de las bodegas González Byass.
Por el contenido alcohólico, hoy las dos vallas estarían prohibidas. Sin embargo, el impacto de la valla del toro de Osborne hace que lo veamos todavía por algunas carreteras de la península, y en banderas y otros símbolos. La verdad es que la publicidad de licores era peculiar. Recuerdo también el "Brandy Soberano. Es cosa de hombres", que hoy es muy muy muy políticamente incorrecto. No hace mucho tiempo quitaron la marquesina que estaba enfrente de la Audiencia de Pamplona que tenía ese anuncio en todo lo alto desde hacía muchos años.
miércoles, 12 de agosto de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario