martes, 30 de noviembre de 2010

Sindicatos y productividad

Leo el resumen de un artículo publicado en el que se analiza la relación entre productividad de los trabajadores y la presencia sindical. El estudio abarca a 4000 empresas (pymes y grandes) de un país muy desarrollado. Son empresas de los sectores manufacturero y no manufacturero.

Los resultados muestran un claro efecto positivo de los sindicatos en la productividad. Y también hay un efecto claramente positivo en los salarios.

¿La gente percibe este efecto positivo de los sindicatos en la productividad? Masayuki Morikawa nos enseña que los sindicatos en Japón logran ese resultado. El artículo tiene mucha más miga que lo que simplificadamente yo he expuesto aquí.

lunes, 29 de noviembre de 2010

¿Queremos comprar productos españoles?

Hace una semana, un artículo de El País Negocios comenzaba así:
Los colores amarillo y azul de la bandera sueca engalanan las tiendas Ikea en centros comerciales de todo el mundo. Opel anuncia sus vehículos en televisión con el eslogan "wir leben autos" (nos encantan los coches) sin necesidad de traducirlo del alemán. Y el grupo bancario ING utiliza como imagen corporativa el naranja, color con el que mundialmente se identifica a Holanda, incluido su equipo de fútbol. ¿Por qué Zara, Freixenet o BBVA no hacen lo mismo? No es que se avergüencen de ser españolas; es que saben que identificarse con su país de origen no les ayuda a vender más en el extranjero, o que incluso puede perjudicarles.
El artículo alude a un estudio sobre la reputación de España en el mundo elaborado conjuntamente por el think tank estadounidense Reputation Institute y el Real Instituto Elcano tras encuestar a miles de ciudadanos de todo el mundo. El resumen que hace el periodista de este estudio es:
España es vista en el resto del mundo como un buen lugar para visitar o incluso para vivir, pero no tanto para trabajar y menos para invertir, y como un país atrasado tecnológicamente frente a naciones de su entorno más cercano.
Ya sabemos que las percepciones de las personas a veces son acertadas y otras veces no lo son. La pregunta que me formulo es: ¿tienen razón los encuestados? Supongo que, en parte sí, y en parte no. Sin embargo todo se me queda en el aire (o no) cuando Philip Kotler (yo estudié su libro de Marketing en la carrera y sigue siendo un buen manual... pero actualizado) dice en esta entrevista que "España debe utilizar a sus multinacionales como marca".

viernes, 26 de noviembre de 2010

Transporte por el mar, la mar... (4)

Siguiendo con la serie de entradas vinculadas a los costes de transporte marítimo del comercio internacional, retomo el cuadro que presenté en el primero de ellos. Este cuadro recoge los costes de transporte o fletes que se pagan por un contenedor, según la ruta.

 
Me preguntó un lector por qué eran diferentes los costes en un sentido de la ruta respecto al sentido opuesto. A fin de cuentas, ¿no serían los costes de transporte similares? Podemos comprobar que enviar un contenedor de Asia a EEUU en 2007 implicaba un coste de 1830$, mientras que de EEUU a Asia se reducía a 990$. De Europa a Asia el coste era de 1050$, mientras que de Asia a Europa subía a 1720$. Y de EEUU a Europa era de 1300$, mientras que desde el Viejo Continente a EEUU era de 1700$. ¿Por qué estas diferencias?

La respuesta la tenemos en Trade Diversion. Se trata simplemente de un factor de demanda. El precio más elevado refleja la mayor demanda. Hay mucha exportación de Asia a EEUU, y menos en sentido contrario. En el enlace que indico se señala que el 60% de los contenedores que "regresan" desde EEUU a China van vacíos. Por ello es más alto el flete de Asia hacia América. Y podríamos seguir el mismo razonamiento para los demás casos. Este es un ejemplo real bonito para explicar la demanda en un curso de Introducción a la Economía.

jueves, 25 de noviembre de 2010

¿Hasta dónde puede llegar el Comercio Justo?

He estado leyendo un libro de Luis de Sebastián, profesor de ESADE, que falleció el año pasado. Se titula Un planeta de gordos y hambrientos. Yo buscaba en el libro aumentar mis conocimientos sobre el comercio internacional de alimentos, pero desde la perspectiva de un autor que tenía una formación académica en economía muy elevada (creo que su director de tesis fue el Nobel Robert Mundell), que era favorable al comercio internacional, pero que a su vez tenía una posición crítica con el sistema capitalista. No he sacado tanta "miga" como esperaba del libro, pero algo he aprendido y hay un párrafo que me ha gustado mucho.

El párrafo trata de responder a algunas ONG críticas con el Comercio Justo, que se enfrentan a otras ONG favorables a él. Ambos tipos de ONG, entiende el autor, buscan apoyar a los países pobres. Las críticas iban dirigidas contra un etiquetado (FLO) que determinados productos pueden conseguir, y que certifica que esos productos se han elaborado siguiendo un tipo concreto de normas de "Comercio Justo". Lo transcribo (y lo suscribo; desde mi punto de vista ahí Luis de Sebastián es muy realista):

El Manifiesto [contra el sello FLO de Comercio Justo] me parece un toque a rebato, una movilización total para luchar contra el imperialismo y la dominación de la agricultura y los alimentos por unas pocas empresas, una realidad que trato de mostrar en este libro. Me parece, sin embargo, que tan altas pretensiones llevan a desvirtuar la naturaleza limitada, posibilista y parcial del movimiento de comercio justo. Ya dicen sus impulsores que no es una panacea para el desarrollo; que hay que emplear otros medios más ambiciosos, más globales y contundentes para eliminar la explotación en el intercambio desigual. Pero mientras se denuncia y se da a conocer al público de los países ricos la injusta realidad del comercio internacional, se ayuda a miles de familias campesinas, las cuales pueden ser semilleros de una transformación de sus sociedades, que en definitiva tienen que llevar a cabo ellos mismos. El comercio justo no puede aspirar a más.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Desarrollo Humano

Ya ha salido el último informe del PNUD sobre Desarrollo Humano, en el que se incluye siempre una comparativa entre el nivel de desarrollo de los países. Esto de "medir el desarrollo" es muy peculiar, y no está exento de críticas, pero ello no exime de intentar hacer alguna comparativa entre países, o de estudiar la evolución temporal de un país. Dentro de los indicadores de desarrollo utilizados se incluyen variables vinculadas al nivel de renta, a la salud, a la educación, y otros.

Dani Rodrik, profesor de Harvard, habla de algunas sorpresas en sus resultados. Destaca que los países que más han visto aumentar sus indicadores de desarrollo humano en los 40 últimos años no son los países del Este Asiático, sino algunos países musulmanes como Omán, Indonesia, Arabia Saudí, Túnez, Marruecos y Argelia. Y tiene razón que sorprende, aunque esto no es novedoso de este año. En los pasados años me tocó explicar en clase estos informes, y ya era evidente este impulso en estos países.

¿Y por qué han visto aumentar sus indicadores de desarrollo? Rodrik destaca el aumento de las oportunidades educativas (y esto, por lo visto, es cierto) y el acceso a los servicios de salud. Y también destaca el aumento de las oportunidades a las mujeres. Y todo ello sin llevar a cabo pasos hacia la democracia tal y como la entendemos por aquí. Este tema se merece un análisis en detalle que nos aclare estos cambios.

También me gustaría resaltar, como hace Puentes Quincenal, unos datos del informe sobre América Latina y Caribe (ALC):
La desigualdad en ALC no es sólo alta sino muy persistente, comportamiento que le mereció el calificativo de la región más desigual del planeta: 10 de los 15 países más desiguales del mundo pertenecen a ALC.

La desigualdad muestra una disminución constante en América Central, mientras en el Cono Sur y la región andina se incrementó durante los años noventa, y apenas hacia la mitad de la década siguiente registró una disminución importante. Sin embargo, los niveles de desigualdad en los países de la región aún son muy altos: Bolivia, Haití y Brasil, por ejemplo.
Por cierto, el informe del PNUD está también disponible en euskera y catalán.

martes, 23 de noviembre de 2010

¿Machaca Alemania a España?

Antón Costas escribe un interesante artículo. De él me gustaría destacar su visión del déficit comercial español en relación a sus intercambios con Alemania. Con la que está cayendo, España está buscando, y buscará durante muchísimos años más, los recursos para sanear tanto sus déficits como para financiar el previsible incremento del coste de las pensiones. Y una vía está en la reducción del déficit comercial (ya cuasi-estructural) con Alemania.
El superávit alemán se debe no solo a su reconocida competitividad, sino a la política de austeridad interna que practicada a lo largo de la última década ha permitido exportar su desempleo a otros países. La reunificación y el miedo a la vejez que le ha entrado a la población alemana ha llevado a practicar con abuso la virtud del ahorro y la austeridad en el consumo. Al actuar de esa forma, han perjudicado a los demás. Su escaso consumo no ha tirado de nuestras exportaciones. Y sus ahorros, sacados del país a la búsqueda de oportunidades que no encontraban dentro por su austeridad, descargaron como un diluvio de capitales sobre España, que sirvió para financiar la burbuja inmobiliaria y distorsionar nuestra estructura productiva hacia la construcción. Además, el euro fuerte le ha venido como anillo al dedo, porque ha perjudicado la competitividad de los demás países en mucho mayor medida que la suya. En definitiva, Alemania ha practicado una política mercantilista que ha dañado severamente a sus vecinos.

En el mismo suplemento de prensa, Guillermo de la Dehesa expone la misma idea:
El aumento futuro de las exportaciones netas permitirá pagar el servicio de la deuda externa contraída. Pero para que así sea es necesario que los recursos externos tomados se inviertan en la producción de bienes y servicios exportables o comerciables. Sin embargo, en España no ha sido así, ya que buena parte de la deuda externa se ha invertido en la producción de bienes no exportables o no competidores con las importaciones, al ser utilizados en buena parte en construir viviendas que no son exportables, aunque algunas hayan sido compradas por no residentes europeos aprovechando los bajos tipos reales de interés y la ausencia de riesgo de cambio españoles.

lunes, 22 de noviembre de 2010

Debate sobre los precios de los alimentos

Este tema me encanta, y me ha gustado el debate que está habiendo entre Dani Rodrik (economista del desarrollo, profesor en Harvard), y Oxfam (o uno de sus representates, Rob Bailey, consejero senior de Oxfam para temas alimentarios).

El tema viene a ser así: Rodrik se refiere a un artículo en el que se indica que cuando los precios de los alimentos suben, Oxfam y otras ONG se quejan de que los perdedores son los países pobres. Y cuando los precios de los alimentos bajan, Oxfam y otras ONG también se quejan de que los países pobres pierden.

Señala Rodrik que los precios altos de los alimentos benefician a los agricultores pobres que son vendedores netos de productos agrícolas, y perjudican a los consumidores pobres de las zonas urbanas. La bajada de precios tendría los efectos contrarios. En cada caso, el efecto neto sobre el conjunto del país dependerá de cómo se distribuye la población. Y aquí tenéis un ejemplo de cómo se distribuye la población en algunos países pobres, clasificada ésta en función de su saldo comprador o vendedor de alimentos básicos. Se ve claramente la disparidad:

Aunque Oxfam-Rob Bailey replica (aquí), creo que Rodrik pone el dedo en la llaga. No sé si focalizar en Oxfam puede ser excesivo, pero a fin de cuentas es una de la principales ONG mundiales en temas de desarrollo y debe asumir ese papel. Entre muchas otras cosas, señala Oxfam, que agradece ser acusada de pensar sólo en los pobres:
I welcome the accusation that Oxfam focuses only on losers in its messaging, irrespective of whether prices rise or fall. That’s our job.
No sé, pero me parece que no va por ahí la crítica de Rodrik. Me parece que es muy fácil decir lo que está mal (o, en este caso, lo que perjudica) y no reconocer [ADEMÁS y al mismo volumen de voz] lo que sale bien (o lo que beneficia). Esta forma de actuar me recuerda a la de aquellos grupos políticos (y personas) para los que los demás partidos hacen absolutamente todo mal. Ese discurso les hace perder credibilidad.

Este gráfico es un ejemplo ilustrativo de lo que dice Rodrik. Se simula el cambio en "bienestar" ante una subida del 10% de los precios del principal alimento básico de cada país, separando a los hogares por lugar de residencia (rural, urbano) y por nivel de rentas (en quintiles). ¿Resultados? Lo esperado: ganadores y perdedores. Este gráfico me parece una respuesta más aceptable.


ACTUALIZACIÓN (23-11-2010): Johan Swinnen, autor del informe que comenta Rodrik, responde a Bailey, de Oxfam.

viernes, 19 de noviembre de 2010

Para los que sepan inglés

Vía Mankiw. Para entender bien la foto de este cartel hay que saber que "Zim dollars" se refiere a dólares de Zimbawe, de los que ya he hablado.

jueves, 18 de noviembre de 2010

Subida del IVA

En los manuales de Economía se muestra el efecto restrictivo que suele tener un aumento de los impuestos. En julio subió el IVA, y ayer el INE publicó los datos de Contabilidad Nacional del trimestre julio-septiembre.

Evidentemente que han pasado muchas otras cosas, y que se debe hacer un estudio detallado, pero mi primera impresión es que la subida del IVA ha tenido el efecto previsible: En la tabla vemos como el gasto de los hogares se ha ralentizado en este tercer trimestre de 2010 (aumentó un 1,4%), respecto a la tendencia hacia la mejora que llevaba desde el tercer trimestre de 2009. Y en la gráfica queda claro que la demanda interna parece que no nos va a sacar de la crisis, y no va a tirar por ahora del PIB.

¡Hay que vender en el extranjero!

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Coste de oportunidad

El concepto de coste de oportunidad suele explicarse en clase de Introducción a la Economía en la primera semana de clase. Eso quiere decir que es un concepto básico. Y aquí viene un ejemplo vinculado a la ayuda oficial al desarrollo.

Se trata de un trabajo de N. Simon Morfit, de la Universidad de California en Berkeley. Se centra en uno de los al menos dos costes de oportunidad que tiene la ayuda al desarrollo proveniente de país rico o una institución internacional. El primer coste de oportunidad se refiere al que existe desde el punto de vista del país o la institución donante: renuncia a destinar esos recursos a otros fines, propios o de otro tipo de ayuda. Y el otro coste de oportunidad se vincula al país receptor, y por aquí va su trabajo.

En concreto muestra cómo la existencia de una auténtica epidemia de SIDA en Malawi ha repercurtido en una fuerte entrada de donaciones internacionales para tratar de reducir las implicaciones de salud y sociales. Pero el coste de oportunidad es que los donantes han reducido muchísimo la ayuda a Malawi para otros temas.

martes, 16 de noviembre de 2010

Esperanza de vida

Estos días está en el Aulario de la Universidad una exposición de la ONG Acción contra el Hambre. Nos muestra el hambre en África. No está mal que nos meneen el corazón de vez en cuando, a ver si alguna vez reaccionamos. Y leí datos sobre la baja esperanza de vida en Mali y en otros países. Y, por otro lado, me encuentro con esta entrada de Paul Krugman en la que hace referencia al aumento de la esperanza de vida DENTRO de EEUU (esto es, no está comparando EEUU con países en desarrollo). Krugman hace referencia a un informe de la Seguridad Social de EEUU. Muestra cómo la mitad de la población más rica de EEUU ha visto aumentar su esperanza de vida 6 años desde 1977, mientras que la otra mitad más pobre "sólo" ha visto aumentar su esperanza de vida 1,3 años. Corolario a lo bruto: También en los países ricos los pobres se mueren antes.

lunes, 15 de noviembre de 2010

Los jóvenes hoy

Ésta es la visión que el catedrático de Sociología Amando de Miguel tiene de la juventud hoy. No sé si le habrán cogido en un momento depresivo, pero el porvenir que nos augura no es bueno. Y para los que tenemos hijos pequeños, una señal de alerta. Para los jóvenes, también. Algunas de sus respuestas a preguntas relevantes:

PREGUNTA: "Nuevos valores de los jóvenes" es el título de su ponencia. ¿Cuáles son y cuáles habría que potenciar?

RESPUESTA: La generación pasada, la que hizo el desarrollo en España, en el último tercio del siglo XX, que fue extraordinario, lo consiguió, entre otras razones, por la inmensa acumulación de capital de trabajo, afán de estudio y de esfuerzo. Pero en la generación del siglo XXI los jóvenes, que algunos ya son maduritos, pertenecen a una generación donde el ocio y la fiesta están en su centro, y no el trabajo. Para mí, ésa es la clave de la crisis económica. No es un fenómeno sólo español, es europeo. Por eso la crisis es mundial o europea. Aunque en China, Chile, Brasil no se da eso, por eso no es del todo mundial. Hay países emergentes que en plena crisis está saliendo adelante.

PREGUNTA: ¿Se lo diría a los más de cuatro millones de parados?

RESPUESTA: No, esos están sufriendo la consecuencia de que no haya productividad y, por lo tanto, haya paro. Porque la productividad de la población que trabaja es muy escasa, y eso produce paro, y los desempleados son las víctimas. Además, mi idea es que todas las personas que están en el paro deberían estar estudiando, todas, excepto las enfermas, y hay muy pocos estudiando. Es más, los que estudian, se esfuerzan poco. Cuando hablo del esfuerzo me refiero no sólo a los trabajadores sino a los estudiantes. Donde se nota más esa flojera y las pocas ganas de trabajar es en los estudiantes. Llevo 40 años dando clases y he visto el proceso clarísimo. En mi facultad, para empezar ya no hay clase los viernes por la mañana porque el jueves por la noche se están emborrachando y alguien decidió quitar las clases de los viernes. Los parados son unas víctimas, no tienen trabajo y no se les puede pedir que trabajen, son las víctimas de la falta de productividad. Los que trabajamos lo hacemos con poca productividad.

PREGUNTA: ¿[Qué] es lo que habría que hacer?

RESPUESTA: Sí. Sí. Entendiendo como trabajo leer o asimilar conocimientos, hay que hacerlo constantemente.

PREGUNTA: La juventud que usted describe se contrapone con otra, la que está muy bien preparada y no encuentra trabajo.

RESPUESTA: Los hay también y están emigrando. Pero son una minoría muy pequeña que en su mayoría ha estudiado en el extranjero, saben inglés y que están emigrando. Y hacen bien, desde su punto de vista.

viernes, 12 de noviembre de 2010

Condiciones laborales

En Comercio Internacional se habla muchísimo de las pésimas condiciones laborales que tienen los trabajadores de algunos países en desarrollo. En Occidente son frecuentes las campañas que llaman a dos cosas: (a) exigir algún tipo de información que diga a los consumidores cómo se han elaborado estos productos, y (b) boicotear los productos de esos países en desarrollo porque como los trabajadores extranjeros cobran poco, hay "dumping social". A veces las campañas piden las dos cosas, otras veces sólo una de ellas.

Acaba de presentarse una (ya "antigua") campaña en Pamplona sobre el tema: Ropa limpia. Y me llaman la atención unas declaraciones que recoge Diario de Noticias de una sindicalista marroquí, Naima Naim, que ha estado presente en esta campaña:
El textil, uno de los tres mayores sectores de actividad en Marruecos, da empleo al 46% de los trabajadores del país y entre ellos, la mayoría, el 85%, son mujeres (...). El 62% de las empresas trabajan para la exportación.

La sindicalista incidió en que en una economía globalizada como la actual "las trabajadoras marroquíes pagan el precio de la competitividad trabajando en condiciones muy precarias". (...) Por ello, pretenden concienciar a los consumidores para que "presionen a las grandes marcas internacionales para que respeten las obligaciones legislativas de cada país". Su objetivo, precisaron, "no es hacerles boicot, sino exigir que se cumplan unas condiciones mínimas en los países productores".

Estas últimas frases salen de una persona que trata de proteger a los trabajadores de su país. Lo que he resaltado en negrita y, especialmente, en rojo, es algo que nos debería llamar la atención. No pide tener la normativa laboral de Occidente. Estos ciudadanos quieren producir esos bienes y son conscientes que los seguirán produciendo sólo si son más baratos que los que se hacen en otros países. Asumen cobrar menos, pero no supone renunciar a tener un salario digno. Esto podría estar justificado por varios motivos: menor productividad que un trabajador occidental, por ejemplo. Por ello se dice que las campañas que se centran sólo en el punto (b) no son más que campañas proteccionistas de (algunos interesados) ricos que perjudican a los países en desarrollo.

jueves, 11 de noviembre de 2010

Negro como el carbón

Aparecía ayer en ABC un artículo en el que se detallaba la maraña que hay en España con el carbón. La cuestión de si las centrales térmicas deben comprar o no carbón nacional, si esto es proteccionista, si esto implica mucha contaminación, si esto cuesta mucho dinero, y otros temas, a mí me deja un poco perplejo. Esto, desde el punto de vista económico no debe ser muy complejo de conocer y permitiría aclarar algo el tema. Desde el punto de vista ecológico es claro que el carbón (el extranjero o el de aquí) es lo más contaminante. Y el punto de vista social ya es otro cantar.

En cualquier caso, del gráfico que adjunta el periódico hay algo que me llama la atención: el volumen de ayudas en relación al número de trabajadores. Si los datos que se ofrecen (ver figura) son correctos, cada trabajador de este sector recibiría potencialmente por ayudas el equivalente al sueldo de un catedrático de universidad (unos 61156 euros en 2012). En esta época de tanto recorte y tanta crisis, esto no me cuadra.


Aunque en Navarra hace tiempo que no hay minería del carbón, tampién nos salpica esta crisis.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

¿Quién nos ha dejado dinero? (2)

Antes de la crisis del euro de la primavera pasada, las compras de Deuda Pública española por parte de los extranjeros la explicábamos aquí. Después de esta crisis o, más bien, inmersos en la desconfianza internacional hacia algunos países de la zona euro, y hacia las cuentas públicas españolas, las cosas no parece que hayan cambiado mucho para China: nos sigue dejando dinero, y en las últimas semanas sigue confirmando que no deja de invertir en euros. Expansión lo explica. Incluyen este gráfico en el que comparan el comportamiento de los inversores chinos en relación a los inversores estadounidenses.


Pero no pensemos que los riesgos únicamente los asumen los ciudadanos españoles y extranjeros que prestan al Tesoro Público de España. En estos días en los que la confianza sobre la capacidad de pago de Irlanda y Portugal está temblando, Cinco Días nos recuerda que España es el tercer inversor extranjero en Deuda Pública portuguesa.

lunes, 8 de noviembre de 2010

¡Quiero comprar productos indios!

Hace un tiempo vimos en el blog cómo las economías más desarrolladas se quejaban de que China no vendía ciertas materias primas, y eso les perjudicaba. Ahora la protesta es contra la India, y con China por medio, según informa Puentes Quincenal. Se trata de un buen ejemplo de ganadores y perdedores con una determinada política comercial:

Grupos textileros de Estados Unidos, la Unión Europea (UE), Turquía y México están alzando la voz en contra de la política de restricción a las exportaciones de algodón que mantiene la India, y que están ocasionando el desabastecimiento del mercado global de este bien, y por lo tanto aumentando los precios internacionales.

Desde abril de este año, el gobierno de la India ha aplicado las medidas que han causado descontento, y que han incrementado el precio mundial del algodón en un 100%, pasando de US$ 0,62 a US$ 1,2 por libra.

“Grandes productores de textiles chinos de propiedad estatal están pagando cualquier precio para asegurar el algodón. Estas acciones están poniendo en peligro lo que había sido una fuerte recuperación de las fábricas textiles de Estados Unidos”, dijo en un comunicado Cass Johnson, presidente del Consejo Nacional de las Organizaciones Textiles (NTCO, por sus siglas en inglés).

Por su parte, David García, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Textil en México (Canaintex), asegura que “los productores de textiles en México no deben ser forzados a pagar precios ruinosos para el algodón, porque la India está subsidiando ilegalmente a su industria nacional a través de sus prohibiciones y restricciones a la exportación”.

Ante esta llamada de atención, el ministro de agricultura indio, Sharad Pawar, afirmó que su gobierno revisará los topes a las exportaciones de algodón en diciembre próximo.

“Si el gobierno es sensible entonces no deberían revisar las decisiones bajo ninguna circunstancia o ningún tipo de presiones internacionales”, dijo Ashish Bagrodia, presidente de la industria nacional textil de la India. “El gobierno tiene que responder primero a los intereses de la industria nacional”, agregó.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

España está que se sale...



Hoy ando un poco justo de tiempo. Pero aquí va este gráfico que publica hoy Martin Wolf en el Financial Times. Ni he tenido tiempo de leer el artículo, pero tiene buena pinta. Y es que España está que se sale... (haz clic sobre la figura para agrandarla):

martes, 2 de noviembre de 2010

China espectacular

Cuando se sale de una época de crisis, en ocasiones, las cifras de recuperación pueden alcanzar cifras altas. Y este es el caso de China, que si tuvo un año 2009 no tan malo (ni mucho menos) que la media mundial, en este 2010 va a aumentar sus exportaciones de manera espectacular. Cinco Días da el titular:

China prevé que su comercio exterior crecerá un 25% en 2010